La NASA ha realizado con éxito la primera etapa del experimento Saffire, una prueba en la que han provocado el mayor incendio espacial hasta la fecha, a bordo de un carguero espacial Cygnus proveniente de la Estación Espacial Internacional (ISS).
Según lo previsto, la NASA hizo arder un pedazo tejido SIBAL, una mezcla de algodón y fibra de vidrio, de 0,4 por 1 metros. El tejido se quemó de arriba a abajo en el interior de un compartimento controlado con el objetivo de analizar cómo se extiende el fuego en condiciones de microgravedad.
«Un incendio en una nave espacial es una de las mayores preocupaciones de seguridad para la NASA y la comunidad internacional», dijo Gary Ruff, director del proyecto Saffire.
Por ello, uno de los objetivos del experimento es comprender cómo se extiende el fuego en las peculiares condiciones del espacio. Aparte de la mera curiosidad, la NASA considera que este tipo de pruebas es crucial para mejorar la seguridad de naves y astronautas en el futuro.
Hasta ahora, este tipo de pruebas se habían hecho con el mismo tejido pero a bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS), por lo que había sido necesario hacer pequeños fuegos y en circunstancias muy controladas para evitar accidentes. Por eso, la mayor muestra quemada hasta ahora era del tamaño de una tarjeta de visita, según funcionarios de la NASA.
En esta ocasión, el tejido se introdujo en un habitáculo provisto de un compartimento doble: en uno hay sensores, cámaras de alta definición y sistemas de procesamiento, y en el otro se extiende el fuego propiamente dicho.
Al parecer, todo ha ido bien: «Nuestro experimento Saffire recorrió 1.600 kilómetros en el espacio, mientras ardía a bordo de Cygnus. La temperatura rebasó los 800 grados centígrados. Los instrumentos del experimento han funcionado según lo esperado», dijeron científicos del Glenn Research Center de la NASA en Ohio en su cuenta de Twitter.
Una vez hecha la prueba, que ha ocurrido de forma automática, está previsto que el módulo Cygnus esté siete días en el espacio para descargar los datos del experimento. Luego todo el material será destruido en la reentrada en la Tierra.
Para averiguar más sobre el fugego en el espacio, Saffire organizará dos vuelos más. En próximas etapas de la misión, se pondrán a prueba nuevos materiales usados de forma rutinaria en la ISS, como retardantes de llamas, ropas de astronatas, muestras de ventanas de Plexiglas y compuestos de siclicona.
Fuente: ABC.es/NASA